NICARAGUA: FARMACIA INSS DE LA COLONIA CENTROAMERICA, FIEL REFLEJO DE DESPRECIO HACIA LOS ASEGURADOS Y UN APENDICE MAS DE LA BUROCRACIA DE ESTA INSTITUCION...TODA UNA EXPRESION DE LA INDIFERENCIA GUBERNAMENTAL.

Por: Alfonso Navarrete C.*

MI TESTIMONIO EN RELACION AL MAL SERVICIO DE LA FARMACIA INSS DE LA COLONIA CENTROAMERICA.

Desde el año 2011 empezó a atenderme uno de los ortopedistas del Hospital Central de Managua en una de las tantas enfermedades crónicas que ya por la edad le son inevitables al ser humano curarse del todo. Para reforzar el tratamiento este especialista empezó a darme un medicamento complementario (dos pastillas diferentes) que debe retirarse en una de las farmacias del INSS, teniendo el suscrito la mala suerte de haberle tocado la FARMACIA INSS DE LA COLONIA CENTROAMERICA.

¿Porqué mala suerte? Pues desde mi primera visita a esta farmacia pude observar una total indiferencia y mala atención de casi 20 personas que allí laboran, en donde un paciente asegurado tiene que esperar hasta 3 ó 4 horas para que le entreguen el medicamento recetado por su médico. Otra de las deficiencias constantes de esta farmacia es que siempre al asegurado le dicen que no hay tal medicamento y le piden al asegurado regresar y, aun cuando éste lo hace varias veces, siempre le dicen que aún no tienen existencia del medicamento. ¡¡ Aaaahhh !! Pero, al que llega a comprar con su dinero en efectivo, a ese si lo atienden a las mil maravillas y en menos de 10 minutos le hacen su factura y entrega del medicamento comprado, y para este tipo de personas si hay existencia de cualquier medicina que ande buscando.

Mi primer incidente con la Farmacia INSS de la Colonia Centroamérica lo tuve el día 2 de Marzo, cuando después de más de dos horas de espera por el medicamento, salieron diciendo que no había una de las pastillas recetadas por el ortopedista (esto ya me lo habían hecho entre Diciembre 2011 y Enero 2012), reclamando fuertemente a los despachadores, pues me entregaban la que antes no había recibido y, en cambio la que sí recibía anteriormente, ahora expresaban que no había en existencia. En ese entonces, preparé una carta para las altas autoridades del INSS y en la recepción de esta triste y "célebre institución" no me dejaron pasar para entregarla personalmente en el despacho del dizque encargado de los derechos de los asegurados.

Hoy, 17 de Agosto del 2012, volví a tener un segundo incidente con el personal de esta misma farmacia, pues desde ayer 16 de Agosto les había entregado mi receta y, resulta que al regresar después de las cuatro de la tarde, no me dejaron entrar a retirar el medicamento aun cuando insistí que mi receta la había entregado desde las dos de la tarde. Bueno, me dije, mañana 17 de Agosto paso a las ocho de la mañana y recibo sin problemas mi medicamento, pero....¡¡ sorpresa !!, el medicamento no estaba listo y me obligaron a tener que pasar el mismo proceso del día anterior, lo que significaba volver a esperar unas dos a más horas para recibir dicho medicamento; por más que les rogué que hicieran el favor de atenderme prontamente por un compromiso laboral que tenía a las nueve y media de la mañana, no se inmutaron, ni siquiera contestaron al ruego.

Por dignidad y respeto a mí mismo, reclamé fuertemente mi derecho como asegurado, por la falta de consideración al tratarse de una receta que había entregado desde el día anterior, por el sistema o modelo de atención burocrática observada (el despacho del medicamento implica pasar por 4 funcionarias de esta farmacia), y pedí me regresaran mi receta y la identificación, asegurándoles que NUNCA MAS volvería a visitar esta deficiente y ya famosa FARMACIA INSS DE LA COLONIA CENTROAMERICA. Por tratarse de empleadas(os) públicas(os) que nosotros mismos pagamos con nuestras cotizaciones y por pertenecer a un gobierno que se dice "estar siempre en revolución", tuve que preguntarles en sus propias caras que si su actuar y forma de atención era parte de la "SEGUNDA REVOLUCION QUE TANTO PREGONA DON DANIEL ORTEGA Y LA CHAYO MURILLO".

La mayoría del personal de esta farmacia son jóvenes hombres y mujeres, de poca sensibilidad social y humana, se les nota en el trato de los cientos de asegurados y jubilados que diariamente llegan a esa farmacia por un derecho que tienen como nicaragüenses. Se observa en sus semblantes que algunos de ellos ni siquiera les tocó vivir la "revolución" de los ochenta, y ahora que nos ven viejos y canosos se les ve actitudes de ser dueños de la verdad y la razón al atender a la gente.

A este tipo de funcionarios(as) públicos(as), hay que ilustrarlas y expresarles con la frente en alto que, la "revolución" que ahora dicen defender, ni parecida es a la revolución que cuando jóvenes nosotros pudimos soñar y en la cual participamos y tratamos de hacer realidad en beneficio y justicia de todo un pueblo afectado por la dictadura somocista, sueño que todos conocemos nunca llegó a ser más que una "revolución en beneficio de la mayoría de los comandantes" y de los "19 de Julio" que se hicieron "revolucionarios" después de la caída de Somoza y su régimen, y que luego se convirtieron en parte de la nomenclatura de su partido, todos hoy identificados como los nuevos ricos y oligarcas surgidos por el "Estado Mágico" que los corruptos y ladrones acostumbran controlar en provecho de sus intereses particulares. Muchos de estos nuevos funcionarios, caso Farmacia INSS y demás instituciones estatales, simplemente son hijos(as) o familiares de los neosomocistas-orteguistas que se encuentran viviendo al mejor estilo de los grandes empresarios y adinerados de cualquier parte del mundo.

RECALCANDO ACERCA DE LA REALIDAD DE LOS ASEGURADOS Y ADULTOS MAYORES.

Sin lugar a dudas, en referencia a los propósitos y verdaderos servicios del INSS, lo que la ciudadanía nicaragüense venimos observando es la constante expresión de un populismo politiquero implícito en una propaganda "muy bien planificada", no para provecho de los miles de asegurados del país, sino para tratar de desviar la atención de lo que en realidad se está haciendo con los fondos del INSS. Venimos aceptando el hecho de que el titular del INSS está siempre adoptando el "complejo de la avestruz", escondiendo su cara ante los complejos problemas que se están viviendo en todo el país y que afectan a los asegurados, jubilados y adultos mayores que ya no pueden siquiera subsistir con las "lismonas jubilatorias" que les entrega el INSS. Es oportuno mencionar que en todo este "burumbumbum" tenemos a una Contraloría General de la República que brilla por su ausencia ante el manejo de los fondos del INSS y ante la realidad injusta que se está cometiendo con los asegurados y adultos mayores de Nicaragua, toda una violación de sus más elementales derechos en materia de seguridad social. Y esto que en esta ocasión no estamos mencionando los cientos de problemas que pasan los beneficiarios(as) de los cotizantes: esposas, madres e hijos(as) menores de edad, ni las malas atenciones y discriminaciones (tipo apartheid) que ponen en prácticas las famosas empresas previsionales del país; esto lo veremos en otra oportunidad, Dios mediante.

¿Qué es lo que estamos viendo en todo el país? Pues, observamos a un titular del INSS muy "orgulloso y triunfante", que se siente respaldado por el principal promotor de la falsa "segunda fase de la revolución" y, por lo tanto, mira a los asegurados, jubilados y adultos mayores como seres humanos que ahora les estorba, como necios y agentes de la derecha y el imperialismo, epítetos que siempre ha utilizado el "revolucionario no revolucionario" para ofender y denigrar a los que le afrontan, incluso para agredirlos y hasta atentar contra sus vidas (en nada se diferencian con las turbas nicolasianas de la dictadura somocista). ¡¡ Y están haciendo todo esto contra la gente humilde trabajadora, asegurados, jubilados y adultos mayores que ya no pueden ni tienen capacidad de sobrevivir por cuenta propia !! Esta es la gente que a diario llega a la Farmacia INSS de la Colonia Centroamérica y lo más patético de esta realidad son los cientos de viejitos y viejitas que humillantemente tienen que esperar largas horas del día para recibir un medicamento que talvez en cualquier otra farmacia apenas puede costar unos cien o doscientos córdobas.

¿Qué puede hacer toda esta masa de víctimas del INSS con pensiones de no más 900.00 córdobas mensuales? Aunque nuestros viejitos(as) reciben en forma alegre su "chequecito" por dicho monto, lo cierto es que a la mayoría los vemos decrépitos y desnutridos, los que nos da una idea del abandono en que los tiene el Estado de Nicaragua. A como he escuchado a algunos de ellos, los gobiernos que han pasado en los últimos años de sus vidas, los está llevando a una "situación africanizada", haciendo ellos alusión a la triste realidad que viven muchos pueblos del continente africano por las sequías y la hambruna desmedida que afecta a las poblaciones de esta parte del planeta. Muchos de ellos expresan que es mejor morir antes de seguir viviendo la desgracia en que los tiene el INSS.

Este fenómeno social es consecuencia de los malos dirigentes políticos, que con sus actitudes ya conocidas por todo el país, lo único que están dejando es una Nación con una población muy sufrida, sin futuro y cada vez más cerca de irse a un profundo abismo del cual será muy difícil salir. Si esto sigue así, las próximas generaciones vivirán en mayores condiciones de pobreza y en un estado total de anarquía y descomposición social; ahí tenemos el ejemplo vivo de los hermanos de la República de Haití, en donde los índices de criminalidad y violaciones a las leyes son productos de la marcada pobreza y descomposición social que les ha hecho "merecedores" en ocupar el primer lugar como el país más pobre del continente americano.

En Nicaragua, entre los ingresos y gastos de la población refleja una brecha demasiada grande, y esto se observa en forma más alarmante en la mayoría de las personas jubiladas y en esos adultos mayores de mucha edad que acuden por derecho propio a servicios como los de las Farmacias INSS que, lamentablemente, no demuestran ni una "pizca social" que les caracterice por ser funcionarios de una revolución entregada a los derechos sociales de los nicaragüenses. A muchos de nuestros viejitos(as), la famosa pensión ni siquiera les alcanza para pagar sus propios recibos de agua y luz, servicios que forman parte de los derechos más elementales de todos los seres humanos del mundo...¿y cómo hace ellos para conseguir sus alimentos, sus medicamentos complementarios y su ropita y calzado?

El desvío de los ingresos por parte del INSS hacia "inversiones" totalmente diferentes a las necesidades básicas del adulto mayor agudiza mucho más las condiciones de vida de los principales actores de esta institución social. Esto nos permite asegurar que ellos(as) difícilmente lograrán aspirar a mejores condiciones, pues el capital del INSS, formado por el sudor y sangre de los asegurados, entra en descuido y falta vigilancia por parte la CGR, afectando desde antes de la jubilación a todos los trabajadores del país. Los últimos gobiernos se han "llenado la boca" propugnando por políticas y programas nacionales para el desarrollo social de la población nicaragüense, para atender las crecientes demandas, pero, lo que miramos en los aspectos de seguridad social, salud y protección social, nos indican otra realidad diferente a las promesas que el gobierno le hace a todos los sectores de la Nación.

En conclusión, la mayoría de los trabajadores asegurados, jubilados y adultos mayores, viven en serias condiciones de pobreza, con delicadas situaciones de salud y sin capacidades y fuerzas físicas necesarias para alguna labor productiva propia de su edad y asegurarse mejores condiciones; viven todos ellos en una sistemática situación de inseguridad alimentaria y de escasa subsistencia como seres humanos. ¿Verán algún día las nuevas generaciones a un Estado Nicaragüense preocupado por la seguridad social de todos los ciudadanos sin distingo de ninguna clase? ¿Tienen nuestros hijos(as) y nietos(as) asegurados sus propios futuros sobre la base de una seguridad económica si políticos y gobernantes siguen manteniendo las actitudes actuales? ¿Seguirán sobreviviendo los asegurados y jubilados si se sigue manteniendo el actual modelo de seguridad social en el país? ¿O es que ya estamos condenados "for ever" a heredarles pobreza y desesperanzas a nuestros hijos(as) y demás descendientes?

La responsabilidad es nuestra en estos momentos, de cada familia y sector de la sociedad nicaragüense, de lo contrario, llegará el momento en que le quitaremos el primer lugar a Haití y, posiblemente, en el año 2050, las próximas generaciones ni siquiera puedan vivir hasta los 40 años de edad. El gobierno maneja muy bien todo esto, no ignora lo que está sucediendo; pero en vez de intervenir en estos asuntos, demuestra falta de voluntad por solucionarlos junto con el pueblo. No podemos ser como el "avestruz del INSS", pues mientras el monarca se mantiene desplegando toda una campaña permanente de mensajes mesiánicos, coloridos, circos y culto a la personalidad, el derecho social del pueblo trabajador sigue siendo violado en forma humillante, grosera e irrespetuosa por parte de todos esos funcionarios que a diario se relacionan directamente con los servicios que ya han pagado los asegurados, jubilados y personas de la tercera edad de Nicaragua.

¿Será cierto entonces, que es mejor morir antes de llegar a la vejez en este país? ¿Son estos los nuevos funcionarios de la "segunda fase de la revolución de Ortega"? ¿Tenemos que obviar nuestra madurez y lo vivido en los años 70-80s y aceptar que estamos en una verdadera revolución? ¿O es que el concepto de revolución ahora el orteguismo-murillismo lo interpreta a su manera y sus propios intereses? ¿Cómo vivirán nuestros nietos(as) y demás descendencias si no salimos del mismo círculo vicioso actual?

"EL PUEBLO ES SABIO, TIENE LA DECISION EN SUS MANOS Y SOLO FALTA QUE VOLTEEMOS NUESTROS OJOS Y SENTIMIENTOS HACIA NUESTROS PROPIOS HIJOS Y FAMILIAS, Y JUNTOS CONCLUIR QUE ES LO MEJOR QUE DESEAMOS PARA NOSOTROS Y NUESTRA NACION".